La fructosa, que no
es más que la azúcar natural que se encuentra en las frutas y verduras, por años
se le ha visto como la causante de la obesidad, afirman investigadores Canadienses.
En recientes estudios
se ha detectado que el azúcar natural de las frutas y verduras no es “toxica”
no causa aumento de peso a diferencia de cualquier otro tipo de hidratos de
carbono cuando es consumido en excesos, esta fructosa no afecta la presión
arterial e incluso puede ayudar a controlar el azúcar en la sangre cuando se
consume normalmente sin excesos. Esto según estudios realizados en donde se compararon diferentes fuentes de
hidratos de carbono.
Estudios revelaron lo
siguiente:
La fructosa no tuvo
un efecto importante sobre el peso corporal según un análisis de 31 pruebas en individuos con las calorías
controladas. El exceso de calorías provenientes de cualquier tipo de hidratos
de carbono contribuye al aumento de peso.
La fructosa no tuvo
ningún efecto adverso sobre la presión arterial en comparación con otros tipos
de hidratos de carbono en un análisis obtenido
de 15 pruebas.
10 gramos de Fructosa
por ración ayudaría al control glucémico (control de azúcar en la sangre),
según el análisis obtenido de seis ensayos.
Según últimos
estudios advierten que la dosis de alta fructosa como la que se encuentra en
los refrescos supera los 25 gr (más de la media de consumo) la cual hace
aumentar el control de peso corporal. Sin embargo, el aumento de peso se debe
en si a las calorías extras consumidas y no solo a la fructosa como tal.
Los resultados del
estudio completo aparecen en la revista
de medicina británica Journal of Nutrition, los autores de estos hallazgos
fueron los doctores John L. Sievenpiper, MD, Ph.D., Russel J. de Souza, ScD,
RD, y David Jenkins, MD, Ph.D., del
Hospital St. Michael en Toronto, Ontario, Canadá.
La investigación fue
presentada recientemente ante el hecho de una polémica publicación hecha por
Robert Lustig, MD, y sus colegas, en la revista Nature, en el describen el
azúcar como "tóxico".
Robert Lustig y sus
colegas argumentan que el azúcar es "tóxica", puesto que conlleva un "efecto
mortal" por medio de la molécula de fructosa de la sacarosa. Pero ello en
sus argumentos hablan del consumo en exceso y en general de azucares como tal.
En los estados unidos
es fomentado el consumo de frutas y verduras, y el consumo de productos
provenientes de estos, sabiendo que las frutas son la tercera fuente de
fructosa en su dieta. .
Nuestros estudios
y meta-análisis controlados de alimentación indican al uso de la
fructosa como benéfico para el metabolismo, sin efectos secundarios o
nocivos.
La publicación de Lustig fue llamada como "correspondencia" en la edición del 23 de febrero de la revista Nature en la que aparecen comentarios de otros científicos. Algunos de estos comentarios hechos denominaron al "documento de
opinión" de Lustig y colegas como "extremo",
"ridículo" y "sensacionalista". También señalaron que el
documento contenía simplificaciones que buscaban demonizar al azúcar en lugar de abordar los complejos
factores (como comer en exceso y agregar el estilo de vida sedentario) que se
asocia mucho con la obesidad en una manera de que sirva de salud pública.
Algunos nutricionistas clínicos como Christiani Jeyakumar Henry, Ph.D., y Viren
Ranawana, Ph.D., del Instituto de Singapur, describen que "la contribución
de azúcar hacia las enfermedades crónicas es más alta para los países desarrollados
que los envía de desarrollo" y que es más probable que el consumo excesivo
de hidratos de carbono de alto índice glucémico son los causantes principal de
la obesidad y la diabetes.
La fructosa, a
diferencia de otros azúcares, baja la glucemia porque se metaboliza de
manera diferente.
El error más común
que comenten algunas personas es el de llamar a la fructosa = glucosa, puesto
que la primera tiene una mejor metabolización que la glucosa y otros azucares.
La glucosa y otros azucares se metabolizan de manera diferente que la fructosa.
La fructosa no
estimula a la insulina y es característicamente de bajo índice glicémico. Por
estas razones, es utilizada a menudo en diferentes aplicaciones de bajo índice
glucémico de los alimentos (y principalmente en cantidades similares a lo que
hay en la fruta). Su estabilidad y dulzura se percibe mejor en comparación con
otros azúcares, lo que la hace más favorable y conduce a una menor utilización
de azúcar en general.
No hay comentarios:
Publicar un comentario